“Las viejas casas hidalgas –escudos de armas en la fachada con sus emblemas y divisas; gárgolas de piedra que figuran ángeles y dragones– se aprietan en las callejas como piezas de un museo abandonado. Recuerdo mi asombro al contemplar la variedad de columnas de la plaza porticada. No hay dos iguales: una tiene como remate un chapitel corintio salvado de un antiguo templo dedicado a Diana; otras, las más modernas, son del Renacimiento; algunas, cuya antigüedad se pierde en los orígenes del país, proceden de un monumento ibérico hoy desaparecido. El pueblo tiene dos tabernas y un horno de asar. El pueblo tiene un palacio del duque de Frías, una torre mozárabe y tres iglesias románicas. Una de ellas con parroquia, retablo, cura, campanario y campana. El pueblo tiene un castillo, con foso, torre del homenaje y defensas almenadas. El pueblo tiene seis calles, dos olmas centenarias, diez cuadras, cuarenta vecinos, una escuela y tres veredas que le llegan del Norte, del Este y del Sur. El pueblo es viejo, noble, pobre, altivo, silencioso, irregular y solitario. El pueblo es la más bella ruina de Castilla la Vieja.”
TORCUATO LUCA DE TENA: Pepa Niebla.
3 comentarios:
Qué ajustada definición del pueblo.
La piedra enferma también tiene su belleza.
Saludos
La primera foto me atrae especialmente. Un beso
Creo que en todas las entradas destaca una. Tal vez haga limpieza...
Gracias.
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