"Sin embargo, describir el color de Venecia es tarea vana. El ávido espectador lo observa continuamente desde su ventana cuando no flota en la góndola con la deliciosa sensación de ser parte de él. Las ventanas y balcones venecianos son un señuelo fatal y cuando se apoyan los codos en los acolchados antepechos, las preciosas horas vuelan."
HENRY JAMES: Horas venecianas.
2 comentarios:
Visitarte es muy reconfortante, Rubén, qué gran fotógrafo eres y cómo sabes colocar los textos adecuados. Admirable. Un fuerte abrazo.
No hace falta el color en Venecia.
La prueba es tu foto.
¡Hola!
Publicar un comentario