“Después fuimos al Charco de los Clicos. El Charco es una pequeña laguna de aguas verdes en el interior de un cráter, mitad del cual, en tiempos pasados, se despeñó hacia el lado del mar. Poco a poco, con tiempo y paciencia, las olas fueron reduciendo a guijarros menudos y arena negra las gigantescas masas de lava y roca que se hundieron allí. De ellas sólo queda un pedregullo enorme, escenográfico, desbastado por la erosión en sus partes más quebradizas. Forma cuerpo con una plataforma amplia, al ras del agua, perfectamente horizontal, que la marea alta cubre.”
JOSÉ SARAMAGO: Cuadernos de Lanzarote.
3 comentarios:
Vaya, qué lograda. Me acuerdo de este lugar; el verde, ese verde, da una sensación extraña, como todo allí.
La foto anterior y la de esta entrada son de una austeridad que asusta. Supongo que hay mucho de la materia de la isla en ellas. No conozco las Canarias, me han hablado maravillas de La Palma y de Lanzarote. ¿Qué me dices?
Un abrazo, Rubén
(cómo pasa el tiempo, la niña crece, preciosa)
¡Como para no acordarse! Un lugar marciano, sí.
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...Y del Hierro y Gomera, que tengo pendientes. Te recomiendo Lanzarote, es precioso. Y muy literario, tengo para varios meses. Eso si no me puede la impaciencia y publico cada dos días. La niña crece, sí, nadie me había avisado. En la foto del margen está en Timanfaya: "Ha visto la nena uno volcán y una cueva".
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