sábado, 13 de septiembre de 2008

A LANZADA


"La ola negra y bordeada de espumas se levanta para tragarlas y sube por la playa, y se despeña sobre aquellas cabezas greñudas y aquellos hombros tiritantes. El pálido pecado de la carne se estremece, y las bocas sacrílegas escupen el agua salada del mar. La ola se retira dejando en seco las peñas, y allá en el confín vuelve a encresparse cavernosa y rugiente. Son sus embates como las tentaciones de Satanás contra los Santos. Sobre la capilla vuelan graznando las gaviotas, y un niño, agarrado a la cadena, hace sonar el esquilón. La Santa sale en sus andas procesionales, y el manto bordado de oro, y la corona de reina, y las ajorcas de muradana resplandecen bajo las estrellas."

RAMÓN DEL VALLE-INCLÁN: "Flor de santidad"






"Pero muy cerca, en la parroquia de Noalla, existe una playa en la que las olas tienen tanta virtud mágica como medicinal tengan los lodos de La Toja. Es la Lanzada, fuera de la ría, en la costa oceánica. Ocho kilómetros largos de playa, golpeada sonoramente por el Atlántico. En ciertos días, tomando las mujeres estériles, a las doce de la noche, un baño de nueve olas, se convierten en fecundas. Nuestra Señora de la Lanzada, desde su ermita, presencia el rito, que ilumina la luna llena. Dicen que donde se alza ahora el santuario, hubo un faro fenicio, para ayuda de los que navegaban al trato del estaño, luego romano y más tarde fortaleza del obispo Sisnando contra normandos. Pasaron los siglos y los reinos, pero María está allí, protegiendo a las bañistas de las nueve olas. El océano, cuando el sol se pone, se tiñe de verde, y los labios reconocen el amargo de la sal marina. Cerca de la ermita, en recientes excavaciones, han sido encontradas sepulturas antropoides. Quién sabe de qué gentes, que han querido enterrarse en la vecindad del Mar Tenebroso, escuchando su voz, monótona y majestuosa."

ÁLVARO CUNQUEIRO: "Pontevedra-Rías Bajas"

13 comentarios:

Martine dijo...

Mágico este encuentro entre las imagenes ( los lichenes dan vida a las piedras ) tan bien captadas, esta música con un trasfondo de vida, de voces... Y estos textos que nos retrotraen a tiempos remotos...
Una vez más, gracias Rubén por estos hermosos paseos...Un beso!

Anónimo dijo...

Hermana gaviota, que diría San Francisco.

Anónimo dijo...

Sí, gente, gente buena.
Has fotografiado el viento de La Lanzada en la primera foto de las miniaturas. Hasta se oye.

Saludo

Anónimo dijo...

Acabo de ver, al salir, que has puesto a la derecha el artículo del sábado pasado de Luisgé M. ¿Leer sirve para algo bueno?, me hace gracia, yo lo recorté y lo tengo sobre la mesa, no porque me pareciera muy bueno sino porque comete el error, tan humano, de la sobre generalización.

rubén dijo...

¿Tú crees? A mí me pareció más bien que relativizaba.

Un beso.

Ginebra dijo...

Relativizar es bueno (generalmente).

rubén dijo...

Generalizar es malo (incluso ahora).

leo dijo...

Durante años a Lanzada pobló mis sueños.
Gracias por el recuerdo, de nuevo.

simalme dijo...

Reconozco que te copié y ahora hago fotos y las pongo en el blog, incluso antiguas. Eso son buenas influencias.

Anónimo dijo...

Quería decir más bien generalizaciones infundadas; ¿qué es eso de creer que porque uno lea mucho va a ser mejor? La sabiduría y la madurez moral no tienen por que ir a la par.
Lo hacemos mucho, eso de dar por sentado que unas cosas llevan a otras.
El que lee mucho sabe más cosas que el que no lee. Fin.
Son malas las generalizaciones, sí.

Saludos

Elvira dijo...

Hola Rubén: ¿Qué me recomendarías para iniciarme en Cunqueiro? No sé qué pasa que de pronto me lo encuentro por todas partes: señal de que toca leerlo. Bellísimas fotos.

rubén dijo...

Yo me inicié con Tertulia de Boticas. Creo que te gustará. Todavía tengo mucho pendiente.

Elvira dijo...

¡Muchas gracias!