viernes, 13 de noviembre de 2009

PALMA VI


"El efecto que produce el interior es inenarrable, de una excelsa belleza, no sólo por la grandiosa desnudez arquitectónica del conjunto, sino por el espectáculo que la luz, filtrándose por rosetones y ventanales, produce en ella. Es de observar que los ventanales de la Seo estuvieron cegados y tapiados durante siglos. Fue don Antonio Gaudí, en los primeros ventanales abiertos bajo su dirección, con inmenso acierto, el que volvió la luz al interior del templo. Los arquitectos antiguos de la catedral la concibieron luminosa, es decir, como una sucesión escalonada de efectos de luz, tanto como una conquista del espacio."

JOSEP PLA: Guía de Mallorca, Menorca e Ibiza.

3 comentarios:

paisajescritos dijo...

Rubén, los que somos de Pla no podemos callarnos: esa "conquista del espacio"... Mallorca, como sucede con Aranjuez es uno de los puntos de conexión entre dos generaciones como la de Pla y Rusiñol. ¿Qué te parecen los "lamparones-carabelas" de Gaudí? A mí siempre me ha gustado el contrapunto, pero sé que han sido muy criticados. Habrás disfrutado de la capilla de Barceló (Barceló aún era gente seria :) perdóname la maldad), la última vez que estuve aún se estaba cociendo (casi casi la cerámica...).

rubén dijo...

¿Casualmente? la próxima entrada es Rusiñol. Me gustaron los lamparones de Gaudí, por supuesto, y también la capilla de Barceló. ¿Cuándo se termina una catedral?

Amparo dijo...

qué bola de luz!