jueves, 20 de agosto de 2015

GLANUM


"La impresionante elegancia, la riqueza estética tanto del monumento levantado en honor de Mario como del arco de triunfo -aunque duramente castigados por el tiempo y las guerras- son un placer para la vista. La mejor luz para contemplarlos es la del atardecer. En el verde césped de los prados de los alrededores a buen seguro se oirá el evocador ulular de las lechuzas, un acompañamiento del soñoliento anochecer provenzal tan frecuente como lo es el chasquido de la pelota de criquet en la lánguida tarde de un pueblo ingés... o lo era. Es de señalar que los monumentos que mayor placer estético producen, la Maison Carrée de Nimes y los dos obeliscos de piedra de Saint Rémy, transmiten una misma sensación de airosa levedad que te hace atribuirles una influencia griega, valga lo que valga esta distinción."

LAWRENCE DURRELL: Visión de Provenza.

1 comentario:

Amparo dijo...

Luz del atardecer, lo tendré en cuenta. Tomaré nota de cuanto cuentes de este viaje.