miércoles, 17 de julio de 2013

OLITE


“Cuando el sol brilla y perfila de oro las almenas, aún parece que se ven tremolar los estandartes y lanzar chispas de fuego los acerados almetes; cuando el crepúsculo baña las ruinas en un tinte violado y misterioso, aún parece que la brisa de la tarde murmura una canción gimiendo entre los ángulos de la Torre de los Trovadores; y en alguna gótica ventana, en cuyo alféizar se balancea al soplo del aire la campanilla azul de una enredadera silvestre, se cree ver asomarse un instante y desaparecer una forma blanca y ligera.”

GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER: Castillo real de Olite (Notas de un viaje por Navarra)

4 comentarios:

virgi dijo...

Envidia (sana) es lo que tengo. Fíjate que si puedo salir este verano, iría por esa zona.
Un abrazo

rubén dijo...

Te la recomiendo. Aunque no sé si en verano. Yo casi no concibo viajar en verano lejos del mar...

Elvira dijo...

¡Qué libro tan estupendo harías con tus fotos y los textos que has seleccionado!

Un abrazo

rubén dijo...

Traigo muchas de tu tierra, ya irán apareciendo.