viernes, 28 de diciembre de 2012

VALENCIA XIII: LA ALBUFERA

“Habían entrado en el lago, en la parte de la Albufera obstruida de carrizales e islas, donde había que navegar con cierto cuidado. El horizonte se ensanchaba. A un lado, la línea oscura y ondulada de los pinos de la Dehesa, que separa la Albufera del mar; la selva casi virgen, que se extiende leguas y leguas, donde pastan los toros feroces y viven en la sombra los grandes reptiles, que muy pocos ven, pero de los que se habla con terror durante las veladas. Al lado opuesto, la inmensa llanura de los arrozales perdiéndose en el horizonte por la parte de Sollana y Sueca, confundiéndose con las lejanas montañas. Al frente, los carrizales e isletas que ocultaban el lago libre, y por entre las cuales deslizábase la barca, hundiendo con la proa las plantas acuáticas, rozando su vela con las cañas que avanzaban de las orillas. Marañas de hierbas oscuras y gelatinosas como viscosos tentáculos subían hasta la superficie, enredándose en la percha del barquero, y la vista sondeaba inútilmente la vegetación sombría e infecta, en cuyo seno pululaban las bestias del barro. Todos los ojos expresaban el mismo pensamiento: el que cayera allí, difícilmente saldría.”

VICENTE BLASCO IBÁÑEZ: Cañas y barro.










3 comentarios:

Amparo dijo...

Por las prisas, me perdí la Albufera, pero aquí están tus excelentes proas y barcas de colores. Me gustan un montón, como cáscaras de nuez en el agua opaca y tranquila.
Es una serie preciosa.
Saludos

Anónimo dijo...

Como una Venecia de arroz.
Saludos y feliz año.

Daniela V. dijo...

Me encantò el post,tu prosa es maravillosa y acompañada con esas fotos mejor aun.Besos.Daniela V.