miércoles, 4 de agosto de 2010

MEDINA SIDONIA


"Por el aire de Medina-Sidonia flota como una mezcla de resignación y arrogancia materializada en las piedras decrépitas y las paredes bruñidas, en las humildes barandas populares y los ricos herrajes barrocos. Por la parte alta del caserío quedan vestigios del que fue famoso castillo moro, que pasó luego a manos del duque de Medina-Sidonia -cuyos dominios llegaban hasta Huelva- y fue finalmente destruido por orden real."

JOSE MANUEL CABALLERO BONALD: De la sierra a la mar de Cádiz.



“El cerro donde se asienta Medina Sidonia no es más alto que la torre Eiffel. Parece construido sobre el llano de la Janda y del Barbate por ingenieros que manejaban bastante bien la roca con revestimiento de tierra. De estas atalayas hay muchas en España, todas desaforadas y dominadoras; todas con su castillo en la cima, su iglesia, su caserío amurallado. Desde lejos, estos hermanos cíclopes comunican, y Sidonia sólo se digna hablar con Arcos, con Vejer de la Frontera, con Alcalá de los Gazules. Pero el cerro de Medina Sidonia, el más gran señor de esta Andalucía baja, es también el más amable y el que mejor oculta su tradición guerrera. La cuesta es agria. Para escalarla ha de resecarse un poco el motor del coche. Bordea el camino una hoya que recuerda el tajo de Cuenca con sus casas colgadas o enquistadas sobre roca viva; pero ésta es su única apariencia feroz a medida que vamos ganando la pendiente, llegamos a huertos y jardines que dulcifican el gesto del monstruo, y, en suma acabamos por ver que se humaniza, es decir, que es tierra también, como el llano y como nosotros. Vueltas y revueltas, antes de llegar a las murallas, que, si no me equivoco, están enjabegadas para disimular su vejez. Casitas claras, proporcionadas, discretas, como hechas por buenos alarifes que no han estudiado arquitectura; casas solariegas con su escudo de la Reconquista, su reja y su patio andaluz, y desde el primer paso que damos por Medina Sidonia, cuestas, siempre cuestas, hasta llegar al descansillo de la plaza triangular; que debe llamarse –de seguro se llama- plaza de la Constitución.”

LUIS BELLO: Viaje por las escuelas de Andalucía.



JOHN MCLAUGHLIN / AL DI MEOLA / PACO DE LUCÍA: Orient Blue.

3 comentarios:

Elvira dijo...

Me encanta la foto y la música, Rubén.

Un beso y buen verano (lo que queda de él)

Amparo dijo...

Foto muy hermosa y simbólica. Una torre partida, el horizonte en medio.
Siempre me han gustado mucho esas praderas cuajadas de flores diminutas.

Saludos!!

Teresa Giménez Pous dijo...

Muy, muy original